La industria automovilística parará casi todas las fábricas en diciembre.
Más de 16.000 de los 72.000 empleados de las plantas están en situación de ERE | Ford en Valencia y Citroën en Vigo pararán todo el mes de diciembre | Los cierres temporales afectan a marcas tan dispares como Porsche y Dacia | Fitch prevé una caída de las ventas del 20% en Europa en el 2009 si el crédito empeora.
"Las necesidades de producción se revisan prácticamente semana a semana", dice una portavoz de General Motors España. En efecto, es raro el día en que en el sector automovilístico no se anuncia un expediente de regulación, un paro técnico o un reajuste del calendario laboral que, en definitiva, sólo tienen un objetivo: paralizar la producción para no acumular más stocks.
La programación anunciada hasta la fecha indica que este mes de diciembre habrá un parón casi total en las fábricas de automóviles. Se dejará de utilizar más de un 90% de la capacidad, una situación que podría prolongarse durante buena parte de enero.
La situación es bastante similar en todo el mundo. Ni siquiera se libran países emergentes como Brasil, donde Fiat, General Motors, Honda y Volkswagen aplican paros parciales. El huracán tampoco está respetando a las marcas más exclusivas, las que suelen resistir mejor la recesión, y la mismísima Porsche ha optado por alargar tres días las vacaciones de Navidad. Incluso el segmento low cost tiene que parar, como pasa en Rumanía con Dacia (filial de Renault), que ha decidido cerrar dos semanas.
En España, más de 16.000 de los casi 72.000 empleados que tienen las fábricas automovilísticas ya están afectados por expedientes de regulación de empleo. A ellos hay que sumar varios miles más en empresas proveedoras, sin que a medio plazo se vislumbre una recuperación clara.
"Las necesidades de producción se revisan prácticamente semana a semana", dice una portavoz de General Motors España. En efecto, es raro el día en que en el sector automovilístico no se anuncia un expediente de regulación, un paro técnico o un reajuste del calendario laboral que, en definitiva, sólo tienen un objetivo: paralizar la producción para no acumular más stocks.
La programación anunciada hasta la fecha indica que este mes de diciembre habrá un parón casi total en las fábricas de automóviles. Se dejará de utilizar más de un 90% de la capacidad, una situación que podría prolongarse durante buena parte de enero.
La situación es bastante similar en todo el mundo. Ni siquiera se libran países emergentes como Brasil, donde Fiat, General Motors, Honda y Volkswagen aplican paros parciales. El huracán tampoco está respetando a las marcas más exclusivas, las que suelen resistir mejor la recesión, y la mismísima Porsche ha optado por alargar tres días las vacaciones de Navidad. Incluso el segmento low cost tiene que parar, como pasa en Rumanía con Dacia (filial de Renault), que ha decidido cerrar dos semanas.
En España, más de 16.000 de los casi 72.000 empleados que tienen las fábricas automovilísticas ya están afectados por expedientes de regulación de empleo. A ellos hay que sumar varios miles más en empresas proveedoras, sin que a medio plazo se vislumbre una recuperación clara.
"Tenemos por delante dos años muy complicados para el sector, ya que el mercado se recuperará de forma suave hacia el 2010", señala Luis Valero, director general de la asociación de fabricantes Anfac. Una opinión que corrobora la agencia de calificación de riesgos Fitch, que pronostica una caída de las ventas en Europa Occidental del 8% en este ejercicio y del 12% en el 2009.
Eso en el escenario menos pesimista. "Si las condiciones del crédito siguen deteriorándose, la bajada estará más cerca del 20% que del 12%", explica en una nota.
El sector automovilístico viene hablando de crisis desde hace décadas, pero lo que diferencia la actual situación es la brusquedad en tiempo y en dimensión de la caída de las ventas. Hasta mediados de año, Anfac estaba convencida de que la producción automovilística española podría registrar este 2008 una leve mejoría, porque las exportaciones podrían compensar la bajada de las ventas en España. Ahora, calcula que la producción caerá un 10%, lo que representa fabricar 300.00 vehículos que el año pasado.
Con quince plantas de producción de once marcas distintas, las vacaciones en diciembre van a ser muy largas. Ford parará su planta valenciana prácticamente el mes entero, Citroën en Vigo suprimirá desde el día 5 dos de sus tres turnos y a partir del día 12 toda la factoría estará paralizada. Peugeot no recurrirá a un ERE, pero utilizará la flexibilidad y su fábrica de Madrid dejará de producir desde el día 12.
Seat parará once días la línea dos, donde fabrica los modelos León, Altea y Toledo, y otros dos días la línea del Ibiza. Todo indica que habrá más días de inactividad en enero.
El panorama es mejor en Volkswagen Navarra. A partir del próximo día 19 parará tres semanas para, según la empresa, las instalaciones de la fabricación del nuevo modelo Polo.
A Nissan en Barcelona la fórmula le está saliendo muy cara, puesto que ha decidido no recurrir a un ERE temporal para ir parando la fábrica y está asumiendo el coste. Ha preferido hacerlo así para no complicar aún más la negociación del otro expediente, el de los 1.680 despidos.
Renault es otra compañía que casi llegará a la paralización total de sus plantas, en Valladolid (once días) y Palencia (catorce días), en el mes de diciembre, aunque las fechas aún no se han fijado.
Iveco, la filial de vehículos industriales de Fiat, tiene expedientes temporales en Valladolid y Madrid. De momento, se libra la pequeña planta de Barcelona, donde fabrica chasis para autocares con 299 empleados. También en el campo de los vehículos industriales, Mercedes cerrará Vitoria desde el día 15.
